NO SE COMO SERA EL FUTURO

Ayer por la tarde recibí un mensaje de nuestro entrañable director, un pequeño tirón de orejas por dejar sin alimento a la publicación. Y es que uno ya lleva un mes en casa, de unos 50m2, y hay días en los que la máquina llega a griparse. Lo que antes se hacía en la soledad, ahora se envuelve con todas las distracciones posibles, y es cierto que es lo que hay, y no podemos quejarnos y estas cosas, pero peor es una guerra, y os puedo asegurar que así es.


No quiero ser un pesado. Puede ser una manera de expulsar demonios que llevan mucho tiempo dentro y ahora piden salir fuera. Es mi modesta manera de ver lo que fuí, donde estoy y hacia donde voy. El pasado no hay que removerlo, pero ayuda a coger perspectiva. No todo es blanco, y menos negro, pero hace tiempo que desconfío de los grises en todas sus tonalidades. Sólo soy un fotógrafo que se gana la vida hoy retratando automóviles, ahora en casa, y que no sabe que futuro le espera… Amigos todos. Esta es mi historia.

Volviendo al tema que nos ocupa, me propusieron que para despejar la cabeza hablara de mí, de mi profesión como fotógrafo profesional que está todo el día buscando localizaciones para retratar un buen coche, o intentar hacer más interesante a la mejor de las modelos. Y bueno…… voy a intentarlo, aunque reciba palos de todos lados si alguien se atreve a leerlo.

27 años de profesión a la espalda, 24 de ellos frelance, fotografiado casi todos los géneros en mayor o menor medida y siempre con los más grandes profesionales de los que unos se puede rodear. Pero….. y siempre hay un pero me ha faltado esa poca de suerte que necesitamos los que trabajamos duro y nunca nos rendimos, pero en 27 años la suerte nunca me ha acompañado. Recuerdo con especial cariño mis inicios como fotógrafo, “paparazzi”, a las órdenes de Chema Clares y en la agencia Europa Press, tenía 19 años. Lo feliz que me hizo empezar a colaborar con la Agencia EFE y aprender de los mejores y lograr esas fotos que me hicieron soñar y que me llevaré a la tumba, no porque ganaran un World Press Photo sino por todo su valor sentimental, fueron los años en los que retraté a los grandes de la música, U2, Kiss, Michael Jackson…. y donde participé en la cobertura informativa del suceso de Miguel Angel Blanco, y por encima de todo la liberación de Ortega Lara. Pero con todo y eso, el teléfono empezó a dejar de sonar….. y fin. Consigo la colaboración con la agencia internacional The Associated Press con Santiago Lyon a los mandos, y en cosa de un par de años una reducción drástica de freelances me hace ver la cara más amarga de esta profesión. Recojo mis cosas y me vuelvo a casa, tiempo que aprovecho para sacarme el carne de conducir y hacer el servicio militar, en la agencia EFE me prometieron que una vez de vuelta optaría a promoción, pero la suerte volvió a darme la espalda. Todo se fundió a negro. Una horrible experiencia en El Mundo de Valladolid me hizo colgar las cámaras un tiempo largo. ¿Porqué?, creo que nunca lo sabré.

Y en este punto es donde se inicia mi contacto con el mundo del automóvil. Llevaba ya dos años trabajando en una gasolinera de Burgos y en la ciudad castellana, mi ciudad, abren de repente un par de medios locales. Intento reponer fuerzas para coger las cámaras y como son las cosas, consigo una colaboración como responsable de la sección de motor y la acepto, ya que podía compatibilizar mi trabajo de noche en la gasolinera con el suplemento que era semanal. Pero, empezaron a llamar para hacer trabajo de calle, y mi vida enloqueció. Apenas dormí un par de horas en un año que se me hizo eterno. Y es en ese punto donde me surje la oportunidad de volver a Madrid a trabajar de fotógrafo y con contrato, la única vez en toda mi vida, me armo de valor y acepto la propuesta. 4 años para la agencia Korpa que los recuerdo como maravillosos y eso que trabajabamos todos como burros. De ahí salto a la editorial Hachette Filipachi, hoy Hearst, y los combino con colaboraciones gráficas en revistas de automóviles de todo tipo. La crisis del 2008 se lleva todo…. hasta los sueños de juventud. Entre medias trabajo para distintas agencias de prensa…. pero sin mucha fe. Aquí fallo personalmente yo, anímicamente no estoy al 100%. Me pongo por mi cuenta a hacer fotos de automóviles sin ningún rédito para no oxidarme y colaboro en varios medios pequeños que terminan siendo un poco engaño. Hearst Magazines también empieza a dejar de llamar…. y por segunda vez en mi carrera, tropiezo.

Cojo la inercia que me ofrece la realización de fotografías de automóviles para web de poca entidad y es en ese punto donde empiezo a trabajar para las marcas de coches. Primero SEAT, después Renault y esporádicamente Grupo PSA. Tanto a SEAT, como a Renault España les estaré siempre agradecido por aparecer en el momento más oportuno, y si no he tirado la toalla ha sido principalemente por ellos. Por ellos y por el director de este canal que me acogió entre sus brazos y me ayudó en los momentos más complicados de mi vida. No podía olvidarme de mi paisano Iván, director de la revista COCHESCLASICOS que tanto me ha ayudado. Tampoco me puedo olvidar de gente maravillosa que en momentos puntuales contó conmigo y me ayudó mucho en lo laboral y también en lo anímico. Y espero que esa relación de amistad y laboral continúe por los años. Fotografías, producción TV, eventos, cursos de fotografía…. al fin y al cabo todo suma. Y ahora…. no lo sé, pero tengo muchos días como los de antaño en que lo veía todo de un negro muy oscuro. Pero eso será otra historia.

COMO SE LLEVA LA CUARENTENA DEL COVID-19

Todo el relato anterior me ha servido un poco de presentación y catarsis. Y es cierto que escribir desde el alma apacigua el corazón y libera un poco la mente. Quería mostraros mis antecedentes. De donde vengo. Las alegrías y las penas. Y hoy…

Ha pasado la Semana Santa y sin inmutarnos un mes encerrado en casa sin poder salir a buscar localizaciones o enseñarselas a un compañero para que haga sus videos más poderosos. Un tiempo que se ha visto lleno de incertidumbre. Llamadas de cancelaciones, anulaciones, aplazamientos de trabajo que le despiertan a uno sus peores fantasmas. Para colmo tengo un poderoso Audi en el garaje que lleva confinado el mismo tiempo que yo. Este año iba a ser mi año, me dije en la Nochevieja de 2019. Que equivocación. El año es probable que empiece en septiembre, o me darán aprobado general. Fotógrafo y autónomo en mi caso no cuadra. Además soy padre de dos niñas que cursan Primaria, y los deberes en casa con su madre teletrabajando ha dejado poco sitio para uno. Los primeros días fueron terribles, todo venía mal, y sentaba aún peor. Había que gestionar mucho sentimiento, y mucha lágrima. Vamos, el día a día.

En lo que a mí concierne, menos mal que los del curso de Photoshop no perdieron la fe y me llamaron para decirme si seguiamos o parábamos. Seguimos, seguimos….. Y en eso he estado ocupado este mes. He realizado 3 cursos de fotografía, retocado todo el material de automóviles que tenía pendiente, y escribir las pruebas que tengo pendientes. He aprendido mucho, y eso es importante, aprovechar el tiempo siempre que se pueda, que no siempre se puede. Las fotografías las dejaremos para después, un después que es empezar de 0, otra vez. Porque uno tiene la sensación de haberse quedado sin clientes, y que tendré que volver a ofrecer mis servicios fotográficos. Espero que no sea demasiado tarde…. Ah!!! mi nombre es Jesús, tengo 46 años y me encanta ser fotógrafo.También puedo decir que he llorado mucho.

Os dejo unas fotos que he retocado estos días en casa con lo que he aprendido de todos los cursos a los que me he apuntado en esta cuarentena.

FUTURO…

Calero me lo deja entrever de manera sibilina. El futuro. Lo primero que pienso es qué futuro. Vender mi equipo porque no trabajo…. ¿ese es el futuro? Volver a caer para levantarse. Ver que cuando parece que encarrilas tu situación laboral, el mundo te da una cornada sin saber por donde y que te tienes que encerrar en casa. Aún así la pregunta era más pedagógica que catártica.

La cuestión iba sobre la creación de presentaciones virtuales dentro del mundo del automóvil. Pues la respuesta es…. no lo creo. Como solución temporal es una buena solución, pero claro hablamos del Grupo Volkswagen que trabaja muy seriamente el medio gráfico en sus múltilples variantes, cosa que otras marcas apenas invierten en ello, y luego les pilla con el pie cambiado. El Salón de Ginebra virtual ha sido una buena idea porque no se le ha ocurrido a nadie, o porque también, no tienen los recursos multimedia del gigante alemán.

A veces pienso que las marcas de coches no sólo tienen que vender coches, tienen que vender todo lo que rodea ese coche, y las marcas del Grupo Volkswagen es algo que trabajan muy bien. No tanto el resto. Crear material gráfico de todos sus vehículos, en sus diferentes mercados, los modelos más carismáticos, procesos de fabricación y un largo etcétera, ayudará a la creación de una biblioteca de medios para que si en un futurible, ocurriese lo mismo que esta vez, tener las armas necesarios para plantear y planificar la presencia en medios de todo ese material.

 

Personalmente no veo muy distinta la forma de trabajar hoy a la que puede ser en un futuro. Sólo cambiarán los soportes, y ahí siempre se va a necesitar a un profesional preparado que haga bien las cosas y cumpla los objetivos encomendados. Sólo queda apretar los dientes, seguir avanzando y dejar volar la imaginación para culminar proyectos interesantes que seguro nos caeran en los próximos meses.

Como véis, la cuarentena del COVID-19 puede ser una oportunidad para refrescar conocimientos y así poder seguir luchando en el complicado mundo del audiovisual. Mientras tanto seguiré echando de menos mis valles, puertos, playas, ruinas y atardeceres donde plasmar lo último en el sector del automóvil, que en este 2020 iba a ser también su año. Me agarro a la esperanza de salir reforzado hacia un futuro del que poco espero para continuar construyendo.

 
 
Fotos: ®j73txu, Texto: ®Jesús M. Izquierdo – jm.izquierdo@onmotor.es / j73txu@gmail.com