KIA EV6, SKODA ENYAQ IV y FORD MUSTANG MACH-E NOS ENSEÑAN PORQUE MOLA UN VEHICULO ELECTRICO

Durante estos últimos meses hemos tenido la fortuna de poder probar tres vehículos 100% eléctricos, que nos han enamorado por diferentes motivos. Por concepto, por diseño, por usabilidad y porqué no decirlo por sofisticación. Los tres modelos son el premiado Kia EV6, el accesible Skoda Enyaq iV y el caprichoso Ford Mustang Mach-e X. Tienen en común su corazón eléctrico con una autonomía que en los tres casos ronda los 500 kms de uso y tres arquitecturas diferenciadas para atraer a un futuro usuario y complicarle la vida en la elección. Se nos olvidaba que los tres fueron finalistas a Mejor Coche del Año 2022.

KIA EV6

Si empezamos por el vehículo coreano, el premiado con el galardón de Mejor Coche del Año en Europa 2022, también es el primer modelo 100% eléctrico de la firma Kia, y no defrauda con su imponente estampa. Estamos ante un vehículo conceptual, grande y poderoso que llama la atención por ofrecer una estética rompedora y futurista. Quizás aquí el modelo americano de Ford pueda rivalizar, pero no es más cierto que entre poseer en la calandra el mítico Mustang al galope o disfrutar de una verdadera nave espacial con ruedas, elijamos la opción coreana. Y es que el Kia EV6 exhibe músculo desde casi cualquier ángulo, con una afilada calandra y un poderoso portón trasero que exhibe un contundente juego de luces que lo hace aún más deseable cuando se circula por la noche. Su interior es futurista, como siempre nos habíamos imaginado que serían los coches del futuro. Un amplio espacio acogedor, amplio y de mucha calidad. Dos grandes pantallas digitales de 12 pulgadas reciben al conductor para ponerse a los mandos con un volante de dos radios lleno de botones, que permite manejar al EV6 sin despistes. Incorpora unas levas en el volante que sirven para las fases de regeneración de la carga eléctrica. El Head-Up-Display con realidad aumentada es todo una maravilla. Una curiosidad, cada vez que realizamos una maniobra activando los intermitentes, el cuadro de instrumentos nos permite visualizar el entorno a través de cámaras que permiten localizar el ángulo muerto.

Los asientos son muy confortables, y la habitabilidad de primera. Además la sensación de confort  aumenta al tratarse de un vehículo eléctrico y por ello la ausencia de ruidos. Dinámicamente es prodigioso y todo gracias a su motor de 77 kWh y 229 CV de potencia con esquema de tracción trasera. Permite una autonomía de casi 500 km. Y si el uso es sólo en entorno urbano, este puede aumentar. A la hora de cargar, permite carga rápida y esta puede dejar listo nuestro EV6 en sólo 18 minutos. Las prestaciones del EV6 son de 185 km/h de velocidad máxima y un 0 a 100 km/h en 7 segundos, nada mal si pensamos que el conjunto pesa casi 2 toneladas. Resumiendo, el coreano es un producto muy convincente si queremos dar el paso a un vehículo completamente eléctrico. Tiene prestaciones, calidad y una estampa muy atractiva. Los precios arrancan desde los 46.000€ sin ayudas.

SKODA ENYAQ iV

Una vez visto el producto coreano, nos adentramos a desgranar el producto checo que la marca Skoda ofrece. Este no es otro que el Enyaq iV, un eléctrico puro de estética SUV que si no llama la atención tanto como el coreano, resulta poderoso por dimensiones. Equilibrado en dimensiones, el producto checo siendo limpio de líneas gana puntos en calidad de fabricación. Su interior no es tan futurista como el modelo de KIA pero es muy reconocible respectó a sus hermanos de marca. Todo está en su sitio, la habitabilidad es superior y la calidad de materiales con algunos de tela y madera le hacen muy acogedor. Calidez sería la palabra.

Externamente es similar al resto de modelos de la gama Skoda, y el Enyaq en concreto se parece mucho al estilo que comparten los Karoq y Kodiaq. Por ubicación de baterías, los vehículos eléctricos son grandes, a veces tirando a enormes. Pero aquí el producto checo está muy equilibrado. Si es cierto que la variante coupé es más atractiva. A diferencia del modelo coreano, el interior del Enyaq lo preside una enorme pantalla central. En este punto parece un calco con el modelo de Ford. Y unos asiento enormes y bien configurados para realizar grandes desplazamientos. Por confort son similares al resto. Las plazas traseras como en todo modelo Skoda son muy amplias y acogedoras.
Dinámicamente es una delicia. Su motor de 77 kWh entrega 204 CV de potencia para una autonomía de casi 500 km y esquema de tracción trasera, sólo el modelo americano es tracción total. Sus prestaciones son de 160 km/h de velocidad máxima y 8 segundos para realizar el 0 a 100 km/h. En cargadores rápidos podemos conseguir el 80 % de la carga en unos 20 minutos. Si realizamos un viaje largo la posibilidad de cargar a 125 kW en corriente continua o los modestos 11 kW en alterna facilitan mucho las cosas. Se conduce fácil y sus maniobras se realizan con facilidad a pesar de sus casi 2 toneladas de peso. Su precio es de 45.300€, en la línea del resto de competidores. Su aspecto más lineal, no tan llamativo como el de su competidor coreano le puede restar atractivo.

FORD MUSTANG MACH-e X

Le toca el turno al producto americano de Ford que recoge su nombre más icónico, Mustang, para denominar a su producto estrella como Mustang Mach-e. De los tres modelos probados es el que más no ha gustado por lo que ofrece y es capaz de dar. No decimos que los anteriores son malos productos, pero no consiguen ganar a los adeptos a una conducción más solvente. Estéticamente es un Mustang con estética SUV. Es el más atractivo de los tres y sus predominantes líneas redondas y los detalles a Mustang de toda la vida como los pilotos traseros  junto a esa discreta línea coupé, le hace muy deseable. Y es que además funciona muy bien. Si un eléctrico convence, este es el Mustang Mach-e de Ford.
Razones para ello, muchas. Estéticamente ya hemos descrito un poco. Su agresivo frontal, su trasera contundente muy Mustang y su línea coupé junto a unas enormes llantas que albergan unas pinzas de freno en color naranja o rojo le suman atractivo. Se accede al interior pulsando un botón táctilmente y se cierra de igual modo. No es el interior más futurista, es el más equilibrado y parecido a un coche convencional. El salpicadero lo preside una enorme pantalla central de 15,5 pulgadas, que incluye toda la información del vehículo, desde el nivel de carga, el infoentretenimiento hasta la posibilidad de descargas juegos para que las esperas no sean tan tediosas.

Siendo conscientes que estamos dentro de un vehículo eléctrico, las dimensiones son un poco más contenidas que sus comparados coreano y checo. Transmite cierta sensación de agilidad cuando se conduce a pesar de su tamaño. El resto de materiales transmite calidad y buena colocación. Al final uno se acaba convenciendo que está circulando con todo un Mustang. Dinámicamente es el que más sorprende, es ágil y veloz. Y eso no afecta en demasía a su autonomía. Quizás el contar con tracción total ayude mucho a su buena dinámica de marcha. Para lograrlo cuenta con una batería de 98,7 kWh y 351 CV de potencia para lograr una autonomía de 440 km. En prestaciones se sitúa en 5 segundos para el 0 a 100 km/h y una velocidad máxima de 180 km/h. Para cargarlo Ford ha dispone de un cargador de 10,5 kW en corriente alterna y de 150 kW en continua, donde logramos el 80% de la carga en apenas una hora. Es cierto que por configuración nada tiene que ver con los dos anteriores, pero a igual de motor el Mustang Mach-e aporta un poco mas de picante. Los precios para un Mustang Mach-e arrancan desde los 69.000€.

CONCLUSIONES

Pueden parecer similares, pero en el fondo nada tienen que ver. Los tres son eléctricos puros, pero encandilan con argumentos diferentes. Uno es más futurista, otro más convencional y el tercero juega la baza del icono deportivo. Sea como fuere, lo cierto es que son tres productos muy recomendables